Más de S/ 87 mil vendieron emprendimientos de Haku Wiñay/Noa Jayatai en “Mistura”

Huaraz en Línea.- Los 40 pequeños productores, representantes de los grupos de emprendimientos rurales de los proyectos Haku Wiñay y Noa Jayatai de Foncodes -programa del Ministerio de Desarrollo e Inclusión- que llegaron a Lima desde la sierra y selva del Perú al Gran Mercado de Mistura 2017, iniciaron su retorno a sus centros de producción satisfechos por el alto nivel de ventas que lograron.

Muchos de los emprendedores de las regiones: Junín, Ucayali, Arequipa, Áncash, Loreto, Lima, Puno, Madre de Dios, Cusco, La Libertad, Ayacucho, Amazonas, Cajamarca, Pasco, Huancavelica, Huánuco; lo vendieron todo inclusive antes que concluyera la feria gastronómica, como las delegaciones de Arequipa y Puno, por lo que tuvieron que hacer pedidos a sus lugares de origen.

En conjunto los emprendedores vendieron 87 mil 455 soles. Los productos más vendidos fueron el yogur, queso, miel de abeja, café, harina de plátano y artesanía diversa.

Pero lo más valioso que se llevan los productores agropecuarios y artesanos no son los ingresos obtenidos sino los conocimientos y los aprendizajes adquiridos durante su estadía en Lima, en un territorio de enorme competencia y ante consumidores cada vez más exigentes.

Si bien Corpus Quispe, vendió toda la quinua, maíz blanco y habas secas que trajo desde Puyca, (cabecera del Cañón de Cotahuasi), este emprendedor, representante de los usuarios del proyecto Haku Wiñay de ese distrito de las alturas de Arequipa, dijo haber advertido que los visitantes le pedían antes que habas secas “Misshi”, harina de esa misma variedad de habas., por lo que dijo que comenzará a producirla para tener más ingresos para la familia.

Martín Pilco Galoc, quien llegó con café orgánico desde el distrito de Chirimoto, provincia Rodríguez de Mendoza, departamento de Amazonas, informó que el café orgánico envasado en bolsas selladas al vacío con diseños de color granate eran más requerido que los que venían en el mismo tipo de envase pero con diseños de color marrón.

Doña Anastasia Mendoza, por su parte, relató que no hubiera podido vender los 100 litros de yogurt batido (sabores fresa y durazno) que trajo desde  Chupa (Azángaro, Puno) si no separaba un lote de otros 10 litros sólo para la degustación de los clientes.

“Estamos aprendiendo a vender, cómo hacer negocio, y a tener experiencia”, ha dicho esta campesina emprendedora, quien vino con Teresa Ramos, otra emprendedora de Haku Wiñay, productora de quesos tipo paria.

El componente de Promoción de Negocios Rurales del proyecto Haku Wiñay/Noa Jayatai, no sólo ofrece fondos concursables, asistencia técnica y capacitación, sino además, brinda oportunidades de articulación a los mercados mediante la organización y participación en ferias locales, regionales y nacionales, con el propósito de hacer sostenibles los emprendimientos económicos de los hogares rurales.

Quinua blanca lavada, habas secas, maíz blanco, miel de abeja, carne de cuy, cuy ahumado, panes, palta, plátano, harina de plátano, aguaymanto, lúcuma, granadilla y chirimoya, fueron algunos de los productos más solicitados.